martes, 31 de enero de 2017


Todo se construye y se destruye tan rápidamente
que no puedo dejar de sonreír.


Charly García

poema I
las cosquillas del amor te despiertan con la luna
interrumpen otros sueños
te detienen en un tiempo continuo de querer y no saber
no hay palabras y la risa incomoda majestuosa
apretás los labios 
entrecerrás los ojos
te dejás ir
no sos vos ni es tu cuerpo
no son las promesas perdidas
ni los versos atrapantes
la gota de ese beso que lo puede todo
el roce infinito de lo que estremece
el aroma como cuchillos lacerantes en la piel
la perla en las manos 
es

# 1
Palabras, esas que vuelan, que no dicen nada, que me mienten, que me exigen más. Palabras huecas de la nada, palabras, nada más que palabras. El mundo es otra cosa. El mundo es otro palo, es la realidad, es la única verdad. Palabras, palabras pasajeras, tan solo palabras que solo me hacer sonreír, que solo me hacen descubrirme una vez más, que me hacen apagar todas conexiones hasta que una nueva estrella domine el decorado.

poema II
no estoy. Me fui. Perdí. Una cueva para despertar sin luz. 
lo que no es no está no fue ni será
nos vemos en Venecia sin góndolas ni riachos
nos cruzamos por París sin un guiño de color
nos perdemos en una Nueva York que no tiene ya misterios
todo eso es mejor que cerrar los ojos y no escuchar ni el último tren

ahora me cobijo entre mis mantas de una furiosa Buenos Aires de destierros
ya no quiero ver el sol 
ya no quiero ver el sol
todas las habladurías se las traga el viento
o el agujero del silencio
porque ya no estoy para volver a cantar otra vez

sigo girando mientras otros giros se atormentan
sigo esperando que alguien se anime a un poco más
puedo morirme en el intento por tratar de seducirte
pero son más los neones de tu mente que te sostienen en tu camarín

chau mundo cruel sigo en vida
tendrás que padecer otras canciones en mi tango sin tragos ni un bandoneón
todos los versos que pudieron aparecer para inspirarme 
solo serán sangre sin dolor

yYa lo dijo mi poeta
todo lo que se construye se destruye con una rapidez universal
así que yo me quedo en su taburete para volver a sonreír

# 2
Tantos atajos para llegar. Tantas mentiras para ver la realidad. Tanta verdad que es imposible mentirle. Tanta opresión por los duendes que se van. Tanta energía que fluye para esta línea de tiempo. Tanta autopista que sabe correr. Se mueren los vientos, el canto infinito sin cisne ni sol, pero alguien sonríe, me muestra la luna, me invita a bailar.

poema III
qué hay Qué fue Qué será 
todas las sombras pasan ante mí 
soy el mismo chico solitario que atrapaba sueños
solo que hoy las pisadas son mis elefantes del ayer
cómo ir Cómo andar Cómo volar
se derriten las mañanas sin una sonrisa
soy el mismo pibe solitario que no creía en vos
pero estas noches se deliran con solo apretar el botón
no puedo enloquecer cuando estoy a punto caramelo
que una serpiente se convierta en manzana
no quiere decir que yo sea mariposa
y pueda saltar de flor en flor
una piedra te aplasta
quedan cenizas
basura
un cofre de gusanos hambrientos
cuándo es Dónde estarás Por qué seguir
intensas gotas limpian el paisaje
soy el mismo hombre solitario que sabe escapar
y ya no importan las asperezas de un tiempo feroz
no voy a enloquecer cuando estoy a punto caramelo
que una manzana se convierta en serpiente 
puede hacer que nos lejanas mariposas
puedan volver a saltar de flor en flor
qué pasa con vos
escapás 
morís en la nada
qué pasa con tu voz
qQue no puede despertar
qué pasa con vos
dormís 
te esfumás
caés
te arrastrás
reía tan solo un instante
y cuando el oro se evapora
te das cuenta que el polvo es un polvo
y ya no estoy más 
me atrapó otro jardín

# 3
Siluetas, ningún festín. Marionetas, la única mirada. Podés esconderte sin sentir, podés encenderte para simular. Ahora que el túnel se afirma y que las voces llaman al final, quizás te puedas derrapar. Pulsión, alguna máscara. Camino, ninguna huella. Alguien... Alguien se va... Alguien... Alguien llega... Alguien...

poema IV
instantes
el mar besa otros labios
yo no tengo tu voz
instantes
se prende la última luz
ya no tengo más sombras
instantes
no hay nadie alrededor
ni las tristes canciones me calman
no hay registros de mi sonrisa
no hay palabras para abrazar 
no hay más cárceles que las que ya sabés
instantes 
con tu nombre sin nombrarte
instantes
sin la furia que nos dé un poco de más 
instantes
para regalar un corazón desocupado
instantes
solo instantes para nadar

# 4
Son las apuestas que regalan sueños, es mi tragedia para despistar, son esos pocos astros que se alinean, las únicas veces que te cruzo me acovacho. Después me voy mirando las baldosas por la vereda de la luna. Creo que esta madrugada dormiré tapado, será otro pulso y la misma almohada para abrazar.

poema V
si el amor espera 
por qué corro desnudo por la carretera
si los fuegos me acarician
por qué no puedo olvidar
lo que es no es lo que hay muchas veces
hay algunos laberintos que te atrapan 
pero el universo es algo más que tu pañuelo de quejas
las cruces ya edificaron tu pared
saltá y sé feliz
las tormentas se escondieron en mi corazón 
hasta que lo hagas explotar 
y mientras sigo encontrado en el mundo saynomore 
susurros a mis oídos 
algunas brumas y muchas alucinaciones
un nuevo anochecer
una nueva manzana para morder
una vieja escalera para subir 
esa que lleva a otros cielos 
sin misterios ni espejos 
donde el amor espera

# 5
Pasamos, el cuerpo se agiganta y se desvanece, no hay furias, solo quedan las miserias, lo que no dijimos, a lo que no nos animamos, ya no estamos más. Podría ser mañana lo que nunca será hoy, cae mi mirada en picada hacia el cordón: tu piel, tu miel, tu color, tu maldita caricia, tu cálido sabor.



Life is very short and there's no time for fussing and fighting my friend

Paul McCartney & John Lennon


poema VI
hay noches desesperadas
nada cuadra
ni tu voz
se oscurece la risa
la fragancia que tus ojos besan 
se evapora en un pálido adiós
ya no puedo dormir 
ya no voy a soñar
ya no quiero morir 
por las balas que pintan
el cuadro se desintegra 
toda ilusión vuela por los aires
cada brote de un azul perdido 
vuela
un ave 
y no entiendo cómo tenés tanto miedo 
de decir que sí
las huellas van y vienen
como las mareas
las olas
el infinito

# 6
A veces la noche trae regalos sin cordel, aquellos sueños que se hacen carne. Puedo morir atravesado ya, ese rayo de truenos, esa flecha de amor. Cada vez que las derrotas pinten la tragedia, solo tengo que abrir la puerta y abrazarte.

poema VII
a veces no podés darte cuenta
pero hay una luz, alguien, un rayo, no sé
siempre hay algo que puede hacer girar tu mundo
solo basta que lo creas, que lo pruebes, 
que te animes a salir del confort de cada día,
del mundo que te quieren hacer vivir, 
de la convivencia que solo te desprecia,
de los fantasmas que te arrojan a cada instante para que no puedas volar
y ser

a veces hay que cruzar la línea
doblar la esquina
dar vuelta varias páginas
y sonreír
después, mirás atrás y están tus huellas

# 7
Todo se derrumba, hay otras ciudades donde ir. A veces darse en el cemento quiebra, pero hay un universo que conspira para mí. Son las últimas horas, los últimos días para hacerme el distraído: una copa, un refugio, una nuez, una mirada, una luna, un río, que al fondo del cristal está tu rostro singular, aunque esta noche tus labios no sean para mí.

poema VIII
cuando espero más se atrasan los relojes
cuando bajo la persiana me siento cobijado
perder los tiempos, el tiempo, sin mirar hacia adelante
el mundo es hoy
no es cuando a alguien le parezca que lo es
cuando en las mañanas no me encuentres
cuando subas a una nube para atrapar una flor
ya no habrá color, no habrá colores, en el jardín del desencuentro
la pálida sonrisa 
se esconde tras los sueños que ya no serán
y ahora y vos y nada y tus vientos 
voy a morir para nunca nacer
voy a estallar con un estruendo
y el eco y el eco y el nudo en las venas
y ya no ser
cuando las estrellas me atrapen en lo alto
cuando te des cuenta que pasó algo más que un tren
no habrá ninguna señal, no habrá señales, que te invite a jugar
ya el silbido me despierta
voy caminando en la tierra descalzo
y ahora y yo y todo y los vientos
voy a nacer para ya no morir
voy a vibrar con algún corazón 
y el pulso y el pulso y el adiós infinito
para volver a ser
voy a apagar la luz y hasta pasado 
voy a buscar un rato que me sacuda de una vez
ya no estoy más

# 8
Voy acercándome a la gran página. De algo estoy seguro, no voy a llenarla de marchitas flores ni de mugres que solo necesitan algo más que una franela. Es la realidad, es la verdad, lo que sé es lo que veo (pero todo lo que ves no es lo que hay). Ya no es mi ruta perdedora, soy ese huracán que ya no avisa.

poema IX
el beso, ese pulso necesario para mí 
pocos rozan mi sabor
pocos cantan la canción de los mágicos momentos
el beso que me derrite de tan solo mirar tus labios 
pero no estás, no te animás 
te vas a perder en tus besos vacíos, fríos, sin color
el beso espera como el amor, la primavera
y ahora que los pájaros se animaron a volver
ahora que rondan mi cabeza tu vida ya no está
el beso me despierta con el jugo de tu cuerpo
mi lengua espera para sentir
decís que no, pero sí, y ya no sé qué hacer
el beso me regala una cuota de su tiempo 
sabe que voy a comprar todos los números 
para empezar a ser lo queramos aventurar
sin el beso no soy más 
sin el beso caigo en los abismos más allá de lo que ya no es
sin el beso no sé como respirar
soy un árbol sin jardín 
una nube sin corazón 
una autopista sin controles
un infinito alucinar de sombras 
un derrotado cuerpo que va a morir
una triste sensación sin sensaciones
una marchita melodía
beso lo que quieran besar estos desterrados labios
beso la pasión y lo que quiera asomarse al sol
beso la única mirada que me guiñe hacia el paisaje
beso lo que quiera que lo bese hasta entender que me puedo encontrar allí
en mi luna

# 9
Hoy todo es para vos, todo, sin guardarme nada. Si te animás a más voy a esperar tu corazón estampa, la risa de tus ojos, el fuego de tu lengua. Quiero la luna, quiero ese río, quiero esos besos que hoy no son, quiero tu luna, quiero tu río.

poema X
abrir otros caminos
dejarse ir
nadar en aguas profundas 
donde la calma se contagia 
no perder tiempo en los pequeños sinsabores
total la vida siempre tendrá otra cachetada para darme
sentir que algunos cardos ruedan solo por rodar
inmensidad de arenas 
no esperar que otra vez te vuelvas a azotar porque no te animaste a más 
perpetuas ilusiones
máscaras que se derriten en la tibia noche
mejor sangrar que abrir la puerta hacia lo que podría ser 
versos en aguas de la mentira
son como estrofas de un hit que ya murió 
pero se agita cada día en un loop de telarañas
busca sobrevivir a lo que es
y se olvida qué vendrá 
cerrar los ojos
mirar con la sonrisa
palpar los últimos vaivenes de este tren sin estaciones para dormir en el abrazo que no será
porque lo fácil se consume lo pasional
cerrar otros caminos
dejarme ir
nadar en calmas profundas
donde el agua de contagia

# 10
Si no estoy muerto entonces despertarme, se acaban mis horas sin piel, esa mágica inocencia que ya no será. Ya no soy yo en este instante, ya no es mi sexo ni mi voz, ya no salté, ya no morí.


Una voz resuena por los 50 (1)
Que esa canción que desconocías se llama “Yo me bajo en Atocha”; 
que tenés que escuchar esto que te traje, mirá;
que intercambiando lugares de chat, sonó la tan necesaria “¿Cuándo le vas a dar bola a mi amigo?”;
"Las luces siempre apagan las estrellas", improvisando el vestido y el amor de Fito en la terraza de calle 10;
las primeras indicaciones orientativas en el Buenos Aires de tus amores (que ahora también es mío);
los mates y el silencio en el parque Saavedra; 
las birras con guitarra en el living platense;
los mambos intercambiados, que de tanto doler ya no lo hacen, y necesitaron la oreja amiga para diluirse;
Gilmour fue aviones y luces en tu cara de otro plano, cantando adormecido y confortable;
Joaquín con sus peces de ciudad y sus viuditas de clicquot, y eso que te gustaba compartir sobre el compromiso y la fuga;
el disfraz de Kiss y la borrachera ventanal; 
el empujón que siempre está en tus hombros;
la lluvia de Liniers; los domingos platenses y en pantuflas;
las novenas causalidades que me hacen recordarte;
una zambita de Mercedes con el último vaso de la noche;
los 4 de Liverpool en una remera negra;
las charlas en los bares perdidos, de nobles corazones.
Pantallazos de estos años, que bien podrían ser vidas, que también podrían ser solo instantes.
Porque lo esencial no entiende de tiempos y tus cuarenta y diez son solamente una forma poética de adornar el momento;
que se hace camino al andar, y el tuyo está esperando que lo camines con tu mejor versión;
que toda la vida es ahora porque hoy es siempre todavía;
que la vida te lleva para todos lados, a lugares insospechados, pero es el amor quien nos regresa a nuestro hogar.
Si todas las cosas pasan, que tu cumple pase y deje sonrisas!
Ecos de Fran Montanaro


poema XI
vine en paz, pero me dio la guerra
ya no supe cómo caminar entre las brasas
me senté a esperar
un hilo de meditación para salir de mí
abrir la nada
despojar el viento
acariciar la imperfección
no razonar ni entender 
mirar los cofres que tienen misteriosas avenidas
para correr a mil
solo sentir
solo vibrar

# 11
Latigar mi cuerpo hasta encontrar una razón cuando no hay nada que entender. Una señal, un gusto de los dos, una fugaz mirada en el cosmos del guiño, un mendigo en la estación hasta que llegue tu tren. Sabré que entenderás este paisaje de flores. Sabré que lo sabrás…

poema XII
hasta acá 
cierro
qué escalones puedo subir sin resbalarme
cuántas varas volverán a rozarme
cuántas caras volverán a mirarme
hasta hoy
muero
las porcelanas ya no tienen el sabor del té
dónde estarán las puertas para escapar 
dónde encenderán los últimos velones
hasta ayer
sueño
si las manías fueran solo fantasmas sin retorno
por qué nos aferramos a la voz secreta
por qué en las mañanas algo pinta bien
hasta nunca
lloro
los tambores se escuchan en el cielo
cuál será la magia que nos devuelva el sol
cuál será el momento para el beso de empezar

# 12
Me quedé sin pilas, nada que decir, nada que hacer, nada que inventar, solo palabras en una licuadora de gritos infernales de amor.

poema XIII
Ojalá existiera un tratado entre tu amor y el mío 
Pero nunca me dejás besarte
Nunca
Entonces las huellas reflejan las idas y vueltas
No mi amor
En este agujero la oscuridad es una dulce compañía 
Todo lo rodado se perdió en anécdotas de una fiesta a la que no volveré 
Se acerca el final
Una nueva ventana por donde espiar el camino
El juego despierta a los amantes
Sonrisas fingidas para correr a las sábanas 
La tv encendida que no dice nada
Mentiras de anoche 
Lujurias sin rostro sin voz sin mirar
Otro champú para un brindis de peinados frescos 
Una cristalina melodía 
La pena de no entender entre tus sí pero no pero sí tal vez quizás 
Otro brindis para fingir las miradas
La mirada
Se termina este cuaderno de neones de burdel
Todas las frases se deshacen en un tatuaje verdadero
Se queda para siempre 
Porque un corazón encendido no entiende de monedas

# 13
Aquí mate y ciudad, caras cerradas y faltas del mágico touch. Es así, es verdad, es la ausencia de roces que hace amargos los días, las tardes y las noches. La última de una serie de últimas pasiones, esos caminos que esquivan el ojo delator. Hay una pista, no está en los libros ni en las oraciones, son las revelaciones que la parca ya nos dio. Un trueno de energía, que el bandoneón siga esperando a los gusanos.

poema XIV
Por qué me guardo lo que siento 
Por qué la roca que hay en mí llora silencio
Por qué ahora que estás tan cerca no puedo hacerlo
Creí que los dolores de este fuego no volverían a quemar
Sentí los labios de la muerte rozar mi pelo
Quedé atrapado para siempre en lo que no será

Mientras me prendo, para distraer, a la tela de las redes
Venden caritas, poses, piel, cuero, ojos sin cielo
Muestran amores que no son
Pintan los cuadros de un misterio que ya pasó

La feria y todas sus ofertas
la noche que me sangró el pecho te la perdiste
Estabas en tu vuelo cáscara de nuez al cosmos de la nada
Y algunas mariposas, sin embargo, te revolotearon, pero no

Lloré detrás de los ray van sin que puedas darte cuenta
Mentí para hacerte distraer y que no huyas 
Caí por fin en mi desolación cuando lo hiciste una vez más

Y busqué, busqué un rayo de luz en la tela de las redes
Miré caritas, poses, piel, cuero, un rostro sin color
Canté canciones que no son las que curten con la moda 
para sentir que sigo aquí en 

La feria y todas sus ofertas
la más pálida ilusión se enciende con un "Hola"
La más cálida traición se apaga con mi "No"

Por qué no cierro las fronteras de mi cuerpo
Por qué no voz no se acuesta a dormir
Por qué ahora que estoy tan cerca lo alejo

La feria y todas sus ofertas
la tentación se arrastra hacia la tela ya sin red
No hay vuelta atrás

Ya no hay dolor
Ya no hay sabor 
Solo el aroma de un quebrado corazón

La feria y todas sus ofertas
la peor manera de empezar
La peor manera
Ya sin dolor
Ya sin sabor 
Solo un aroma

# 14
Preguntas y más preguntas, nada de sol. Questions. No hay día después cuando las ventiscas no traen la lluvia, me quedo en mi luna de silencios y de eclipses certeros. Preguntas que no puedo curar. Questions sin answer. Quiero mi casa sin respuestas, desnudo, la música de la copa ardiente, mi andar vagabundo de la cama al living.

poema XV
se apagan las luces
se pagan las músicas
se apaga la escena
no mi corazón
aún siento que late
que puedo vivir
que los golpes de la muerte 
no arrastran fantasmas
por el camino solitario de la búsqueda insaciable
no hay sal que no pueda endulzar una flor
las cuerdas se aflojan
ya no suena mi guitarra como ayer
ya no hay trapecistas que jueguen sin red
ya no puedo atrasar el reloj
hay arena cayendo
gota a gota de sudor
marcan el tiempo 
sin mirar atrás
la orquesta se atrapa en un solo de aves
nadie puede dejarse torcer entre tanto color
aunque parezca un inmenso vacío
ya no hay forma de nacer 
de nuevo ya no hay fuerza 
que no llegue aquí
en el desierto
en la montaña de nieves eternas
en la cueva sin sol y sin lunas
hay algo que puedo volver a regar

# 15
Después de tanto andar, me doy cuenta que algunas cosas llegan a su fin. No se puede insistir donde no hay, no se puede torcer el hierro con una caricia, es el terremoto que agita los sueños, aquel barrilete que nunca voló. 



Todo lo que hicimos, la mentira y la verdad,
todo lo que hicimos sigue vivo en un lugar.

Fito Páez


poema XVI
De repente
todas las palabras dichas se esfuman
los mensajes atronadores se hacen silencio
las miradas del amor se pierden en el océano del verso
pero sigo aquí riéndome porque perdiste tu lugar en mí

A veces 
lo que deseamos va más allá de la conspiración del universo.
A veces 
es más simple que la lluvia en mis manos.

Volver a abrir el corazón 
aunque pueda desintegrarme en la transformación

Y si otra mano acaricia tu piel 
es porque mi sol se escondió tras las nubes

# 16
Miraba la foto de aquello que fue. Después me senté a recordar: el beso feroz de un pálido adiós, este verso que no es, lo que no te animaste.

poema XVII
La lengua me explote por tanta ofensa 
Mis ojos se mueran por no ver tu corazón 
La boca se cierre por malgastar tinta sin una frase de amor
Mi cuerpo se pudra por no entender tu chispa

Ahora puedo llorar y no me verás 
Ahora puedo caer en un vacío eterno
Ahora puedo fingir que estoy como antes en la foto
Pero estoy muerto, sáquenme de aquí

# 17
Ausencias. Esperar que nada brote. Ausencias que laten. Ausencias vagas. Ausencias vanas. Ausente del primer mordisco. Ausencias. Esta noche me derrito aquí, en la única fogata de silencio.

poema XVIII
Lo persiguen de todos los lados, no se deja estar
Entrar en su roca de cristal
Nadie lo ve, pero saben que es él
Gira en silencio, seduce al pasar,
corre las sombras para que no lo atrapen

Sabe que es tiempo de entregar su pasión
Cuenta los rostros sin mirar
No quiere ver, sabe esperar
Un trago en silencio, risas de andar,
prende un sahumerio de sombras parlantes

Puedes ir y venir
Puedes andar y respirar
Puedes sentir que aún hay sueños
Puedes cantar

Puedes mentir otra vez
para edulcorar la furia
Puedes dejarte vencer en un abrazo
para cantar

A cierta hora de la madrugada 
abre el misterio para que vean
Una perla es el mar para navegar
Una perla sin olas, sin viento, al natural

Es tiempo de abrir el pecho, a qué, a quién
Nadie se atreve un poco más
Sabe que ven, que hay ojos de amor
Duda, siempre duda de las miradas cemento,
pero hay cristal en su cuerpo, ¿lo habrá en su corazón?

# 18
Se va limando. Las asperezas se tornan flor. Me toca mezclar. Las mejores luces no me alcanzan. Las palabras de amor se desvanecen. Podría tocarte. No estás. La furia del viento se llevó la tarde. No creo que llueva aquí adentro. Voy. Una tormenta afín. No voy a regalar sonrisas. Contar desde tres hasta ser otra vez.

poema XIX
la vida es tu vida si amanece por fin
si no fuera tu vida sería la mía sin una noche caliente
por ser tu vida y no la mía muero sin saber dónde acampar
dónde lavar mis culpas
dónde caer vencido por fin
es que hago de la mía lo que es mía la vida
la mejor vida
la vida de todas mis vidas
la vida...

# 19
La foto está llegando, me mira, me hace mirar, sabe que no voy a reír. Tras el cristal de la roca insiste para el otro lugar. Abrir, cerrar, mirar, no ver. Al fin soltar, dejar, salir, ir, volver, mirar a la nada del todo sin fin.

poema XX
Puedo ver la luz
No es bendita ni un túnel 
No es amor ni sos vos ni es el sol
Puedo sentir que la noche lo devora todo 
No son rabias del destino 
Ni las fortalezas que se desintegran
Enigma en las cornisas
Volver a salir
Volver a girar
No morir en la víspera de la ilusión 
Aunque las esperanzas sigan vendiendo colores
Hay partes que crecen
Hay partes que vuelven a nacer
Hay nubes que regalan sueños para despuntar
Hay flores sin suspiros 
Hay viejos caminos como flashes
Y hay algo que me pulsa a ir a más

# 20
Anochece sin miedos, ningún resbalón. Salir a patear, no ver. Los colmillos afilados. Ninguna idea del amor ni amor ni el amor, ninguna aventura que no cuaje. Salir de aquí y transmutar. Puedo avanzar sin un suspiro. Puedo quedarme a llorar la luna. Puedo abrir la puerta y entrar.


Una voz resuena por los 50 (2)
A veces es difícil lidiar con lo libre del alma y las ataduras del mundo. 
Creo que a algunos se nos encomendó esa tarea: generar el balance y aprender que no existen los límites para ser lo que el universo quiere y necesita que seamos.
A veces, a estas almas tan libres, se las trata de atar, de ligar con las energías más bajas, y entonces, en un momento de defender lo que les es propio, lo defienden y se aíslan.
Creo que entiendo tu proceso porque es muy parecido al mío. 
Vinimos a esta vida a hacer más de lo que hacemos, a disfrutar y trasmitir.
Y claro, como todo aprendizaje, cuesta.
Hoy es un día que no puede pasar inadvertido, que no debe.
Hoy es día de mimos, día de celebración.
Una vuelta más al sol de tus pasos como hombre y de tu alma como ente libre y en evolución.
Brindo a la distancia, porque ninguna travesía se realiza sin emociones y sin sentimientos.
Brindo por tu grandeza de sentir y por tu coraje para emocionarte y emocionar.
Felicidades, mi amigo, porque a veces las amistades son así, identificaciones y cariño sin explicación.
Te deseo risas, amor y pluma.
Mucha tinta para contar lo que fue, lo que es y lo que será.
 Ecos de Rocío Vidal


poema XXI
Hay gente que no merece...
Hay gente que se va de mí 
Hay gente que no entiende
Su tibieza se regodea con el lodo
Hay gente jugada que se anima a más 
Hay gente necesaria
Hay gente que de solo mirarte se queda
Y hay gente que puede ocupar tu lugar
Hay instantes que se van en el último tren
Hay rayos que queman el alma
Hay abrazos que jamás tendré 
Y hay miradas rumiantes
Hay miles de palabras chatas
Hay cientos de promesas vanas
Hay noches que desborda el frío 
Pero miro tus ojos y ya lo sé

# 21
La caja está vacía. Cerrar los ojos e imaginar. Solo la maldita tv que hace gestos inmundos. Mirar la caja vacía. Sé dónde estoy, sé dónde voy. Desandar. Un día, una hora nomás, un instante infinito, un signo, una voz, esa voz.

poema XXII
No soy yo
Ya no soy
Las cadenas se quebraron 
Los pantanos se tragaron mi espesor 
Puedo andar
Puedo ver
Puedo descubrir mi mal
Puedo descascararme sin enmascarar lo que no es
Un látigo infernal
Un sacrilegio de amor
La bondad por quedar bien
Y toda la mezquindad para cubrir la soledad
Fotos que salen otra vez
Ninguna sintonía 
Ningún rey
Otra marioneta en el eslabón
Un escalón para subir
Un escalón para bajar
Mi desnudez
Y toda la desfachatez 
Ya no soy más lo que no fui
No soy lo que no es
Es lo que ves
Es lo que hay
La nada
Vacío 
Silencio
Una pizca de amor
Una gota de sal

# 22
La tengo que beber, ahora o no soportaré el temblor. Mirar a todos lados y ya no ver a nadie. Pensar en otra vuelta sin nada que atrase el reloj. El corte aquí en mi pecho me hará volver a respirar mañana a la mañana cuando puedas aterrizar.

poema XXIII
Solo necesitaba una picadura para darse cuenta de la traición 
Ojos brillantes
Manos sueltas
Careta de soñador
Después, llegaron los misiles a la cama
Golpearon en cada despertar de amor
en cada anochecer sin tiempo
Solo corría en las mañanas para que la parca pasara de largo
Mentiras calientes
Labios escondidos
Reflejo de ocasión
Antes, pudieron decirse todo
Callaron para no oscurecer la verdad
para no amanecer los vientos
Solo miraba las noticias sin esperanzas hasta que lloviera de una vez
El pubis sin ángel 
La risa imperfecta
El gusto de estar
Ahora, abrieron los surcos
Cabalgaron hasta que durmiera el sol
hasta que la luna quisiera sentir

# 23
Te escribo todas las noches porque no puedo besarte cada día, porque no tengo la fortaleza para decir que sí. Te miro cada día en el silencio porque no puedo regalarte mis noches, porque ya sé que tu frecuencia no es para mí.

poema XXIV
La sangre se revela
No mi corazón 
Aunque pueda desintegrarme
No estarán tus besos
Para qué fingir si no habrá luces de neón 
Para qué esconder lo que jamás verás
Respondiste mi mensaje 
Aún trato de entender
Las melodías que tocaste
antes de que caiga
Fue tu manera de decir que no
Fue tu cortesía a mi inspiración
Hoy no hay estrellas 
No hay salvación 
No hay un costado de sonrisa caliente
No un avispero de palabras silentes
Hoy estoy muerto
Ahora brindo con mis fantasmas
la gota de lo que pudiste beber
Te fuiste a Nueva York, Santiago o París 
Todo da igual
Todo pasó 
Todo ya fue
Hoy estoy muerto
Quiero beber mi sangre
Quiero volver

# 24
No sé que veo, algunos fantasmas de antes de ayer, aguijones, pequeñas ilusiones, ninguna pesadilla para recordar, un libro despojado, una canción olvidada, mi espejo sin adentro, sin alma, sin tiempo.

poema XXV
Se abre el cielo
La guerra está lejana ya
No encuentro una manera de salir de aquí 
Son solo marionetas que hacen el caldo gordo
Una falsa mueca con los dientes marfil
Una tentación como una pálida caricia
Hoy ya no es hoy
Ya no es ayer
No es mañana 
Ni un corazón para endulzar amor
Se abre el cielo entre algunas furias
Duermo tranquilo porque me soñarás

# 25
Pasado y futuro, dos aguas sin viento, aromas sin tiempo, caminos de ayer y de un tal vez. Subo un escalón más hacia el cielo seductor de la última estación de la noche.


A partir de mañana empezaré a vivir la mitad de mi vida.
A partir de mañana empezaré a morir la mitad de mi muerte.
A partir de mañana empezaré a volver de mi viaje de ida.
(…)
La mitad de muerte empezaré a morir a partir de mañana.
La mitad de mi vida empezaré a vivir a partir de mañana.

Alberto Cortez


poema XXVI
Pasado y futuro
Dos aguas sin viento
Aromas sin tiempo
Caminos de ayer y de un tal vez
Silencios en brindis 
Tu cara y la mía 
Pasiones que escapan
Que fueron y ya no serán
Hoy
Aquí 
Ahora
Me planto
Me quedo a mirar
Subo un escalón más 
Hacia el cielo seductor 
De la última estación de la noche

# 26
Se abre el cielo, la guerra está lejana ya, no encuentro una manera de salir de aquí. Hoy ya no es hoy, ya no es ayer, no es mañana. Duermo tranquilo porque me soñarás.

poema XXVII
No sé que veo
Algunos fantasmas de antes de ayer 
Aguijones
Pequeñas ilusiones 
Ninguna pesadilla para recordar 
Un libro despojado
Una canción olvidada
La misma frustración de estar
Un placar lleno de mentiras 
Un baúl sin emoción 
Una pila de palabras sin corazones 
Mi espejo sin adentro
Sin alma
Sin tiempo

# 27
La sangre se revela, no mi corazón. Respondiste mi mensaje, aún trato de entender las melodías que tocaste. Fue tu manera de decir que no. Fue tu cortesía a mi inspiración. Te fuiste a Nueva York, Santiago o París, todo da igual, todo pasó, todo ya fue.

poema XXVIII
Te escribo todas las noches
porque no puedo besarte cada día
porque no tengo la fortaleza para decir que sí
se pueden dar las cosas
se pueden regalar sonrisas
son gratis
y alguna flor marchita
se quedará en mis páginas
para leer su aroma juntos
cuando el calendario se canse de joder
Te miro cada día en el silencio
porque no puedo regalarte mis noches
porque ya sé que tu frecuencia no es para mí si
te doy mis inseguridades
te doy una cornisa para sufrir
para saltar
y tantos ojos al viento
que anuncien las tormentas
de lo que ya no quiero ser
Te busco con mis tempestades 
para que puedas arroparte en mí
para que quieras dejarte atrapar
Te espero hasta que te desprendas
de las hojas de tu almanaque marchito
que solo te retrasa hasta mi sol

# 28
Ojos brillantes, manos sueltas, careta de soñador. Mentiras calientes, labios escondidos, reflejo de ocasión. La risa imperfecta, el gusto de estar.

poema XXIX
La Copa está vacía 
La necesito llena
La tengo que beber
Ahora o no soportaré el temblor
Entiendo a lo que se derrite
Por tanta melancolía 
Lo que se desvanece
Por tanta soledad
Mirar a todos lados
Y ya no ver a nadie
Pensar en otra vuelta 
Sin nada que atrase el reloj
Comprendo algunos simulacros
Por tanta hipocresía 
Algunos desparpajos
Por tanto rechinar
Suenan las campanas
Que nada traen
El corte aquí en mi pecho
me hará volver a respirar
Mañana a la mañana
Cuando se vaya el mambo
Cuando se anuncien las trompetas
Cuando puedas aterrizar
# 29
No soy yo, ya no soy, puedo andar, puedo ver, puedo descubrir mi mal. Un látigo infernal, un sacrilegio de amor. Ninguna sintonía, ningún rey, un escalón para subir, un escalón para bajar, mi desnudez. No soy lo que no es, es lo que ves, es lo que hay: una pizca de amor, una gota de sal.

poema XXX
La caja está vacía 
Abrirla cada noche
Esa maldita sensación que algunos no padecen
Cerrar los ojos e imaginar
No hay nada para ver
Solo la maldita tv que hace gestos inmundos 
Mirar la caja vacía 
Los años de fuego son arrugas 
Tiempos malditos se esfuman en un toque
Volver a hacer
Volver a encender
Volver a soltar amarras
Vela al viento
Velas en la noche
Velas de humo
Sé dónde estoy
Sé dónde voy
Big bang
Desandar
Un día 
Una hora nomás
Un instante infinito
Un signo
Una voz
Esa voz
La magia otra vez
Quizás 
Solo es cuestión de ver más allá

# 30
Hay gente necesaria, hay instantes que se van en el último tren, hay rayos que queman el alma, hay abrazos que jamás tendré, hay miles de palabras chatas, hay cientos de promesas vanas, hay noches que desborda el frío, pero miro tus ojos y ya lo sé.


Una voz resuena por los 50 (3)
Que me disculpe la coincidencia por llamarla necesidad.
Que me disculpe la necesidad, si a pesar de ello me equivoco.
Que no se enoje la felicidad por considerarla mía.
Que me olviden los muertos que apenas si brillan en la memoria.
Que me disculpe el tiempo por el mucho mundo pasado por alto a cada segundo.
Que me disculpe mi viejo amor por considerar al nuevo el primero.
Perdonadme, guerras lejanas, por traer flores a casa.
Perdonadme, heridas abiertas, por pincharme en el dedo.
Que me disculpen los que claman desde el abismo el disco de un minué.
Que me disculpe la gente en las estaciones por el sueño a las cinco de la mañana.
Perdóname, esperanza acosada, por reírme a veces.
Perdonadme, desiertos, por no correr con una cuchara de agua.
Y tú, gavilán, hace años el mismo, en esta misma jaula,
inmóvil mirando fijamente el mismo punto siempre,
absuélveme, aunque fueras un ave disecada.
Que me disculpe el árbol talado por las cuatro patas de la mesa.
Que me disculpen las grandes preguntas por las pequeñas respuestas.
Verdad, no me prestes demasiada atención.
Solemnidad, sé magnánima conmigo.
Soporta, misterio de la existencia, que arranque hilos de tu cola.
No me acuses, alma, de poseerte pocas veces.
Que me perdone todo por no poder estar en todas partes.
Que me perdonen todos por no saber ser cada uno de ellos, cada una de ellas.
Sé que mientras viva nada me justifica porque yo misma me lo impido.
Habla, no me tomes a mal que tome prestadas palabras patéticas y que me esfuerce después para que parezcan ligeras.
Ecos de Liliana Mottola
poema “Bajo una pequeña estrella” de Wislawa Szymborsk


poema XXXI
Anochece sin miedos ningún resbalón 
Salir a patear no ver
Los colmillos afilados
Sería de otro mundo si lo entendieras 
Sin ataduras ni misterios
Solo el placer de ser
Ninguna idea del amor
Ni amor ni el amor
Ninguna aventura que no cuaje
Todo es pulmón y no mirar atrás 
No ver más 
Salir de aquí y transmutar
Los pibes hacen esquina
Copan la plaza de fuego
Mi sombra juega con leche y arroz
Puedo avanzar sin un suspiro
Puedo quedarme a llorar la luna
Puedo abrir la puerta y entrar

# 31
Enigma en las cornisas, volver a salir, volver a girar. Hay partes que vuelven a nacer, hay nubes que regalan sueños para despuntar, hay flores sin suspiros, hay viejos caminos como flashes y hay algo que me pulsa a ir a más.

poema XXXII
La foto está llegando 
Me mira 
Me hace mirar
No quiero
Da vueltas 
Sabe que no voy a reír 
No río
Para qué 
Si ya sabés que hay en mí 
Si ya sabés que hay adentro de todo 
Tras el cristal de la roca
Insiste
Mirar para allá 
Para el otro lugar
Ese lugar al que no quiero volver
Ese lugar para escapar 
Sí escapar 
Como a la risa de la foto que llega a buscarme
Como la luz que no quiere salir para regalar algo más que sol
Me mira e insiste
Clic flash obturar
Abrir cerrar mirar no ver
Mirada lasciva que ataca y se filtra 
Es un espejo 
Es mi reflejo perdido en mirarme a mí
Al fin soltar dejar salir ir volver
Mirar a la nada del todo sin fin
Una última ilusión 
Entro a la luz

# 32
La vida es tu vida. Si no fuera tu vida sería la mía. Por ser tu vida y no la mía es que hago de la mía lo que es mía, la vida.

poema XXXIII
Ausencias 
Nunca se atreverán a besarme
Siempre esperarán mi paso
Ausencias
La bandera no flamea 
Los vuelos llegan sin vos
Ausencias
Esperar que nada brote
Cuando trepan las urgencias
Ausencias 
Te subís al baile del mejor postor
Te caés en el sofá de tus recuerdos
Ausencias que laten
Que irrumpen con un pensar
Que secuestran las madrugadas
Para dejarme sin consuelo 
Ausencias vagas
Ausencias vanas 
Ausente del primer mordisco
Suenan trompetas y no estoy llegando
Nada es perfecto y ya lo sé
Ausencias
Tus palabras son mi dibujo perdido 
La mirada ya no agita más
Ausencias
Querés que te regale un corazón 
Pero te escondés en la pecera de los sueños
Ausencias
Ya me quemé en el deseo
Ya me desintegré en el tormento
Ausencias
Esta noche me derrito aquí 
En la única fogata de silencio

# 33
Lo persiguen de todos los lados, no se deja estar. Nadie lo ve, pero saben que es él. Gira en silencio, seduce al pasar. Cuenta los rostros sin mirar. No quiere ver, sabe esperar. Un trago en silencio, risas de andar. A cierta hora de la madrugada abre el misterio para que vean. Sabe que ven, que hay ojos de amor.

poema XXXIV
Se va limando
Fuego
Las asperezas se tornan flor
Sangro
Me toca mezclar
Para qué 
Las mejores luces no me alcanzan
Podría volver a fingir 
Aire 
Las palabras de amor se desvanecen
Respiro
Podría tocarte
No estás 
La furia del viento se llevó la tarde
Bebí algunos tragos para zafar
Agua
No creo que llueva aquí adentro
Miro
La noche domina
Hay voces
Nada que se parezca a tu piel
Tendría que dejar de tejer
Tierra 
Jamás esperaré a los barcos
Voy
Una tormenta afín 
Corto los cables
El mundo se puede quedar a dormir
No voy a regalar sonrisas
Corazón 
Las golosinas son para glotones
Amo
Tener una ventaja en la mochila
La íntima pasión 
Contar desde tres hasta ser otra vez

# 34
La lengua me explote por tanta ofensa, mis ojos se mueran por no ver tu corazón, la boca se cierre por malgastar tinta sin una frase de amor, mi cuerpo se pudra por no entender tu chispa. Pero estoy muerto, sáquenme de aquí

poema XXXV
Miraba la foto de aquello que fue
La distancia no cura el pasado
Envuelve un paquete sin piel
Lo arroja al arcón de los sepia
Después me senté a recordar
El barco sin muelle ni orilla
Las olas sin tiempo y sin paz
El beso feroz de un pálido adiós
Y las pulgas saltan
Hay un banquete
Y los sueños devoran
Y los giros del no
Maldita palabra
Y no voy a jugar
Qué importa si es lunes o si va a llover
Hay sangre que limpia
Hay un grito ausente
Hay una mejilla otra vez
Hay alas sin gloria
Una triste melodía 
Este verso que no es
Hay un poco más de mí 
Lo que no te animaste
Hay una llave en la puerta
Y una ventana algo abierta

# 35
Todas las palabras dichas se esfuman, los mensajes atronadores se hacen silencio, las miradas del amor se pierden en el océano del verso. A veces es más simple que la lluvia en mis manos. Y si otra mano acaricia tu piel es porque mi sol se escondió tras las nubes.


A mis cuarenta y diez, cuarenta y nueve dicen que aparento,
más antes que después, he de enfrentarme al delicado momento
de empezar a pensar en recogerme, de sentar la cabeza,
(…)
Pero sin prisas, que a las misas de réquiem nunca fui aficionado,
que el traje de madera que estrenaré,
no está siquiera plantado
(…)
Dicen que hay besos de esos que te los dan
y resucitan a un muerto.
(…)
¿A quién le puede importar,
después de muerto, que uno tenga sus vicios...?

Joaquín Sabina


poema XXXVI
Después de tanto andar
Me doy cuenta que algunas cosas llegan a su fin
No se puede insistir donde no hay
No se puede torcer el hierro con una caricia
Es el terremoto que agita los sueños
Aquel barrilete que nunca voló
Cartas para ir a la cama
Como si fuera tan fácil que te invite a dormir
La cerradura está sin la llave para espiar
Los ojos se pierden en lo que no es
Una pequeña ilusión para transpirar 
La gota de un tiempo mejor
Estoy tan perdido que me encuentro
Estoy en la nave infernal sin un puerto
Palabras tan solo palabras que aman
Para dar calor hace falta algo más que una hoguera
Después las cenizas germinan
Una nueva mirada hacia lo que pueda ser
Se abre una pista para invitarte a bailar
Pero tengo que ver si serás algo más que una resaca

# 36
Se apagan las luces, se apagan las músicas, se apaga la escena, no mi corazón. Ya no suena mi guitarra como ayer, ya no hay trapecistas que jueguen sin red, ya no puedo atrasar el reloj, ya no hay forma de nacer de nuevo, ya no hay fuerza que no llegue aquí.

poema XXXVII
Preguntas y más preguntas 
Nada de sol
Todos cuestionamientos
Questions 
¿Por qué no me hablás? ¿Por qué escondés el dolor?
¿Será que tanto te mataron?
¿Será que no podés escapar?
¿Querés mis alas para volar?
¿Querés envolver la ocasión para otro día?
No hay día después cuando las ventiscas no traen la lluvia
Me quedo en mi luna de silencios y de eclipses certeros
Preguntas que no puedo curar
Cuestionamientos a mis distancias
a mi aislamiento
Questions sin answer
Quiero irme a casa
Mi casa pobre y real
La que cobija mis miedos
La que enciende mis tesoros ocultos para que nadie los maltrate
La que me abre al momento
El refugio
El único disfraz que no invento
Quiero mi casa sin respuestas
Desnudo
Nada de voces parlantes
La melodía del cuerpo
La música de la copa ardiente
El sonido del primer acorde
Mi vago recuerdo de innovaciones
Mi andar vagabundo de la cama al living
Sin amantes de circo ni preguntas de color
A un paso de la vida
A un fino paso de empezarme a responder

# 37
Por qué la roca que hay en mí llora silencio. Creí que los dolores de este fuego no volverían a quemar. Quedé atrapado para siempre en lo que no será. Estabas en tu vuelo cáscara de nuez al cosmos de la nada y algunas mariposas, sin embargo, te revolotearon, pero no. Por qué no cierro las fronteras de mi cuerpo, por qué mi voz no se acuesta a dormir.

poema XXXVIII
La alegría no es solo brasilera
pero las caras porteñas no dicen mucho
Aquí mate y ciudad
Caras cerradas y faltas del mágico touch
Es así
Es verdad
Es la ausencia de roces que hace amargos
los días
las tardes
y las noches
Histeria colectiva
Histeria subterránea
Histeria de avenidas y adoquines
Nunca una sonrisa
Nunca la mirada cómplice
Siempre atravesar los cuerpos
Pisarlos
Escalar
Y en todo ya no hay más
La soledad te abraza 
Porque todo es desconfianza
Porque solo esperan y no dan
Porque es mejor hacer la guerra que el amor
Así que elijo perderme
Hacer mi última jugada
La última de una serie de últimas pasiones
Esos caminos que esquivan el ojo delator
La gran mentira de las religiones
Las promesas con edulcorantes
Los sueños que se saben 
se derretirán con el primer rayo de sol
Hay una pista
No está en los libros ni en las oraciones
Son las revelaciones que la parca ya nos dio
Andar
Hacer camino
Un trueno de energía
Que el bandoneón siga esperando a los gusanos

# 38
Ojalá existiera un tratado entre tu amor y el mío, pero nunca me dejás besarte. Nunca. Sonrisas fingidas para correr a las sábanas. Lujurias sin rostro, sin voz, sin mirar. Otro champú para un brindis de peinados frescos. Otro brindis para fingir las miradas.

poema XXXIX
Me quedé sin pilas
Nada que decir
Nada que hacer
Nada que inventar 
Solo palabras en una licuadora de gritos infernales de amor
Nada que te ayude
Nada que te banques sin mirar al que pasa por el frente
Nada más que silencio
Vacío total
Absoluto abismo 
Un túnel de caricaturas 
Palmas en la espalda antes de apretar el botón 
El gatillo 
La guillotina que corta pañuelos
Otro señuelo para despertar un corazón 
Caigo otra vez
Pero ya sin redes ni en tus redes
Agua 
Muchos torrentes que arrastran al final
La peor madrugada 
La que hechiza
La que versa ilusiones 
La que me vuelve a dejar morir en soledad 
Una ráfaga de agujas que parten
Giran
Se clavan y sueñan
La primera bocanada 
El primer destello
Un rayo feroz que intenta colarse
Y abrir la puerta para volver a jugar

# 39
Qué escalones puedo subir sin resbalarme. Cuántas varas volverán a rozarme. Cuántas caras volverán a mirarme. Por qué nos aferramos a la voz secreta. Por qué en las mañanas algo pinta bien. Cuál será la magia que nos devuelva el sol. Cuál será el momento para el beso de empezar.

poema XL
Podría hablar del amor
Y caer rendido a tus pies
Y después mirar que no era yo
Sino mi sombra
Latigar mi cuerpo hasta encontrar una razón 
Cuando no hay nada que entender
Es o no será y ya no habrá cuestión ni duda razonable
Igual cada día te veo
Una señal 
Un gusto de los dos
Y sé que jamás iré a buscarte
Nunca tocaré a tu puerta a pesar de intuir donde estés
Una fugaz mirada en el cosmos del guiño
No hay nada que escarbar
Lo veo en tus ojos de brillo eterno 
No es por mí
Es lo que te regala el día a día 
Hasta que deje la red y toque tu corazón
Me voy a embriagar con todas las luces esta noche
Un mendigo en la estación hasta que llegue tu tren
Sabré que entenderás este paisaje de flores
Sabré que lo sabrás de tantas veces que miré tu risa virtual

# 40
Vine en paz, pero me dio la guerra. Ya no supe cómo caminar entre las brasas. Me senté a esperar. Abrir la nada. Despojar el viento. Solo sentir. Solo vibrar.


Una voz resuena por los 50 (4)
Una tarde, le vino al alma el deseo de dar forma a una imagen del Placer que se posa un instante. Y se 
fue por el mundo a buscar bronce, pues sólo en bronce podía concebir su obra. 
Pero había desaparecido el bronce del mundo entero; en parte alguna del mundo entero podía encontrarse 
bronce, salvo el bronce sólo de la imagen del Dolor que dura para siempre. 
Era él quien había forjado esta imagen con sus propias manos, y la había puesto sobre la tumba de lo 
único que había amado en la vida. Sobre la tumba de lo que más había amado en la vida y había muerto 
había puesto esta imagen hechura suya, como prenda y señal del amor humano que no muere nunca, y 
como símbolo del dolor humano que dura para siempre. Y en el mundo entero no había más bronce que el 
bronce de esta imagen. 
Y tomó la imagen que había formado y la puso en un gran horno y se la entregó al fuego. 
Y con el bronce de la imagen del Dolor que dura para siempre esculpió una imagen del Placer que se 
posa un instante.
Ecos de Checha Kadener
poema “El artista” de Oscar Wilde


poema XLI
Si no estoy muerto entonces despertarme
El águila que avita en mí se perdió en la montaña
Unos tragos no aventuran una cita
Ni siquiera una plástica ilusión
Los autos pasan como si mi urgencia necesitara guiños
Vuelan algunas mariposas que no son de amor
Se acaban mis horas sin piel
A veces una máscara lo aclara todo
Beber hasta que se derrame la paciencia
Esa mágica inocencia que ya no será 
Volar por un pilón de verde hasta renacer 
Hasta renacer
Letanías
Lejanías
Una curda sin tu voz
Sangría 
Sintonía 
Ningún soplo al corazón
Ya no soy yo en este instante
Ya no es mi sexo ni mi voz
Ya no hay ni una ventana abierta
Ya no soy yo
Ya no salté 
Ya no morí 
Ya no morí 
Ya no morí

# 41
Abrir otros caminos, dejarse ir, nadar en aguas profundas donde la calma se contagia, sentir que algunos cardos ruedan solo por rodar, inmensidad de arenas, perpetuas ilusiones, máscaras que se derriten en la tibia noche, cerrar los ojos, mirar con la sonrisa, cerrar otros caminos, dejarme ir.

poema XLII
Hoy todo es para vos
Todo
Sin guardarme nada
Si te animás a más voy a esperar tu corazón estampa 
La risa de tus ojos
El fuego de tu lengua
Sabés que sos destino
La última canción de hoy
La estampida hacia las nubes
Quiero la luna
Quiero ese río
Quiero esos besos que hoy no son
Quiero tu luna
Quiero tu río
Hoy la magia se expande
Signos
Ninguna distracción terrena
Si los depredadores se visten de luciérnagas curiosas
Ojos ávidos de herir
Trapecistas con red
Espera al otro lado del puente
Del camino invisible
La única mirada
Voy por la luna
Voy a ese río
Voy a los besos que ya se despertarán
Voy por tu luna
Voy por tu río
Ahora, ya lo sabés

# 42
Te vas a perder en tus besos vacíos, fríos, sin color. Y ahora que los pájaros se animaron a volver. Decís que no, pero sí, y ya no sé qué hacer. Sabés que voy a comprar todos los números. Sin el beso no soy más, soy un árbol sin jardín, una nube sin corazón, una autopista sin controles, un infinito alucinar de sombras, un derrotado cuerpo que va a morir, una triste sensación sin sensaciones, una marchita melodía.

poema XLIII
Voy mirando al costado
Mocasines a la derecha
Y a la izquierda corbatas de ocasión 
Tantas batallas para la tibieza de durar
Solo durar
Voy acercándome a la gran página 
De algo estoy seguro
No voy a llenarla de marchitas flores
Ni de mugres que solo necesitan algo más 
Que una franela
Es la realidad
Es la verdad
Es la única verdad la realidad
¿Es la realidad esa ficción sin un trago?
¿Lo es sin ese humo tan dulzón?
Lo que sé es lo que veo
(Pero todo lo que ves no es lo que hay)
Buceo hasta escarbar en tierras desconocidas
Me voy a las entrañas de un abismo de aguas clandestinas
Para saber
Para entender un poco más 
Para saber un poco más
Es mi refugio mi hogar
Ya no es mi ruta perdedora
Ya no cae sobre mí ese techo desgastante
Ya estoy otra vez bailando en las calles 
Camaleón 
Escarabajo
Alquitrán 
Soy ese huracán que ya no avisa 
Que se llevó tus palmeras de confort
Que agita tu piel
Que llueve sin mojar
¿Quién dice que está bien?
¿Quién dice que está mal?
Sin mocasín hago mi día 
Hago mis días 
Hago la vida
No es tan malo descalzarse y ver qué pasa
El contacto con la Pacha abriga vientos de cambio
Entona la ocasión
Hace que todo suceda

# 43
Cuando espero más se atrasan los relojes. Cuando bajo la persiana me siento cobijado. Perder los tiempos, el tiempo, sin mirar hacia adelante. El mundo es hoy. Y ahora, y vos, y nada, y tus vientos, y el eco y el eco y el nudo en las venas y ya no ser. Y ahora, y yo, y todo, y los vientos. Voy a apagar la luz y hasta pasado. Voy a buscar un rato que me sacuda de una vez. Ya no estoy más.

poema XLIV
Todo se derrumba
Hay otras ciudades donde ir
A veces darse en el cemento quiebra 
Pero hay un universo que conspira para mí
Son las últimas horas
Los últimos días para hacerme el distraído
Después la navaja corta donde es
Y ya no hay señales para vos
Una copa
Un refugio
Una nuez
Una mirada 
Una luna
Un río
Atravesarlo todo
No mendigar
Darte mi pasión 
Mi sol
Mi último suspiro
Y uno más 
Que sepas que hay azul
y que también hay verde
Que todo puede ser
Y puede suceder
Que al fondo del cristal está tu rostro singular
Aunque esta noche tus labios no sean para mí

# 44
Siempre hay algo que puede hacer girar tu mundo, solo basta que lo creas, que lo pruebes, que te animes a salir del confort de cada día, del mundo que te quieren hacer vivir. Doblar la esquina, dar vuelta varias páginas y sonreír. Después, mirás atrás y están tus huellas.

poema XLV
A veces todo da vueltas
Es el champú que dispara desniveles
Son las alegres caras que sostienen
A veces la noche trae regalos sin cordel
Aquellos sueños que se hacen carne 
No necesito que algo toque mi fría piel
Dan vuelta mariposas
Se hacen a la vida
Se hacen al color
Puedo morir atravesado ya
Ese rayo de truenos 
Esa flecha de amor
Cada vez que pueda escaparme 
Ya sé que no es para huir
Cada vez que las derrotas pinten la tragedia
Solo tengo que abrir la puerta y abrazarte

# 45
Hay noches desesperadas. Se oscurece la risa, la fragancia que tus ojos besan. Ya no puedo dormir, ya no voy a soñar, ya no quiero morir. Las huellas van y vienen, como las mareas, las olas, el infinito.


No sos adulto hasta el día que te entierran. Nunca sos adulto.

Keith Richards


poema XLVI
Pasamos
El cuerpo se agiganta y se desvanece
No hay furias, solo quedan las miserias
Lo que no dijimos
A lo que no nos animamos
El calendario marca su sentencia
Ya no estamos más
No es una noche cualquiera
Un trago de este azul viste la velada
Enciendo las últimas fogatas sin trovador
La pálida azotea del muestrario
Podría ser mañana lo que nunca será hoy
Cae mi mirada en picada hacia el cordón 
Paso cerca tuyo sin derramar
La sangre que no oculta nada
La peor de las sonrisas 
El mejor de los tormentos
Mi resurrección, aunque no creo en nada
Tu piel
Tu miel
Tu color
Tu maldita caricia
Tu cálido sabor

# 46
Si el amor espera por qué corro desnudo por la carretera. Si los fuegos me acarician por qué no puedo olvidar. Las cruces ya edificaron tu pared, saltá y sé feliz, las tormentas se escondieron en mi corazón hasta que lo hagas explotar, y mientras sigo encontrado en el mundo saynomore, sin misterios ni espejos, donde el amor espera.

poema XLVII
Un jugo de limón para calmar las ansias del estómago 
Un vaso de cerveza para clamar tu amor
Una pisca de certeza para saber qué puedo imaginar
Una triste canción para entender que nunca lo será
Son las apuestas que regalan sueños
Es mi tragedia para despistar
Son esos pocos astros que se alinean
No tengo tiempo para mi lugar
Las únicas veces que te cruzo me acovacho
La oscuridad de mi silencio sabe derrotar tu sol
Después me voy mirando las baldosas por la vereda de la luna
Es la hora para vencerme de una vez
Réquiem para no endulzarme
La angustia solo pasa a descansar
Me podría aventurar a una cama o a un deseo
Pero un corazón inquieto busca más
En mi ataúd de miedos vuelvo a cobijarme 
Mejor no ir para no resentir
Creo que esta madrugada dormiré tapado
Será otro pulso y la misma almohada para abrazar

# 47
Instantes. El mar besa otros labios. Instantes. Ya no tengo más sombras. Instantes. No hay nadie alrededor. No hay palabras para abrazar. Instantes. Con tu nombre sin nombrarte, sin la furia que nos dé un poco de más. 

poema XLVIII
Siluetas
Ningún festín 
Marionetas
La única mirada
Podés esconderte sin sentir
Podés encenderte para simular 
Pero los últimos momentos se perderán 
En tu fábula mediocre de tibiezas
Camino 
Ninguna huella
Sencillo
La primera torpeza
Ahora que el túnel se afirma
Y que las voces llaman al final
Quizás te puedas derrapar
Pulsión 
Alguna máscara 
Limón 
La enésima expresión
Dónde estoy...
Alguie...
Alguien se va...
Alguien...
Alguien llega...
Alguien...

# 48
Soy el mismo chico solitario que atrapaba sueños. Soy el mismo pibe solitario que no creía en vos. Soy el mismo hombre solitario que sabe escapar. Dormís. Te esfumás. Caés. Te arrastrás. Reís tan solo un instante. Te das cuenta que el polvo es un polvo y ya no estoy más, me atrapó otro jardín.

poema XLIX
Tantos atajos para llegar
Tantas mentiras para ver la realidad 
Tanta verdad que es imposible mentirle
Tanta opresión por los duendes que se van
Tanta energía que fluye para esta línea de tiempo
Tanta autopista que sabe correr
Tantos lamentos sin muro que aguante
Tanta ironía que ayuda a crecer
Tanto decirte que espero cuando quería el silencio
Tantas nubes derramadas porque no volverías a estar
Tanto anunciar mi próximo viaje
Para que te derritas con solo esperar
Las malas nuevas llegaron 
Las manos se aquietan
El río no vuelve a cantar
Se mueren los vientos 
El canto infinito sin cisne ni sol
Pero alguien sonríe 
Me muestra la luna
Me invita a bailar

# 49
Sigo girando mientras otros giros se atormentan. Sigo esperando que alguien se anime a un poco más. Puedo morirme en el intento por tratar de seducirte, pero son más los neones de tu mente que te sostienen en tu camarín. Ya lo dijo mi poeta. Todo lo que se construye se destruye con una rapidez universal, así que yo me quedo en su taburete para volver a sonreír.

poema L
Palabras
esas que vuelan
que no dicen nada
que me mienten
que me exigen más
Palabras huecas de la nada
palabras
nada más que palabras
El mundo es otra cosa
no son palabras
son juramentos de amor
es dar la vida en una palabra
es dar la sangre
la piel
el sol en trece
la luna en cuarto menguante
Palabras
siniestras que despojan maravillan
palabras que no regalan más que el placer
la última estocada para intentar ese afecto recurrente
las pálidas mentiras que lo tornan verosímil
el destrozado corazón sin una luz en el horironte
ni un humo de socorro que alerte la estampida
El mundo es otro palo
es la realidad
es la única verdad
es desnudarte para entender que es posible el cobijo
no la certeza de otra ilusión amordazada
la soledad del universo
el microcosmos derretido entre tus brazos
la mejor canción
Palabras
tibias palabras que endulzan
que no descubren el verde del fluir
la peor de las traiciones se revelan
se acuestan en otras sábanas y luego piden el perdón
se acogen al silencio eterno como si la eternidad fuera para siempre
palabras
palabras pasajeras
tan solo palabras que solo me hacer sonreír
que solo me hacen descubrirme una vez más
que me hacen apagar todas conexiones hasta que una nueva estrella domine el decorado


# 50
Las cosquillas del amor te despiertan con la luna. Interrumpen otros sueños. No hay palabras y la risa incomoda majestuosa. Apretás los labios. Te dejás ir. La gota de ese beso que lo puede todo, el roce infinito de lo que estremece, el aroma como cuchillos lacerantes en la piel, la perla en las manos.


Una voz resuena por los 50 (5)
Hoy cumple años Diego TL. Sin sus consejos, sin su apoyo, sin sus historias, sin sus abrazos, sin su vida militante; yo nunca hubiere pisado el arena del activismo.
Diego es de esas puertas que abren mundos que conquistan. Uno nunca olvida esas puertas que salvan vidas, que comprometen la existencia hasta la célula más revolucionaria. Diego es de esas bisagras entre el conservadurismo y la flamante libertad. Su cerradura abrió un pórtico de emancipación.
Esta puerta me mostró un universo que no solo salvó mi vida, sino la de muchxs otrxs.
¡Eterna vida a Tedeschi Loisa!
Ecos de Andrés Ruffini


Bonus Track
Miro tus ojos
Miro tus ojos
Solo los miro
Me dicen todo
Aún lo que nunca dirás

Miro tus ojos soñar
Una señal a mis labios
Quieren andar
Quieren brillar

No es tan difícil girar la esquina
Es la hoja en blanco la que te tiene mal
Son los sabores que pueden transformarte
Hay más, siempre tendrás un poco más

Miro tus ojos
Y veo el sol en las noches tristes
Miro tus ojos 
La luna sale a cantar

Miro tus ojos 
que piden más
El mar de tu sonrisa
El volcán que puede desbordar

A veces los silencios abren el juego
A veces lo que ves no es lo que hay

Miro tus ojos
Y veo tu voz
Miro tus ojos 
Y entiendo todo
Miro tus ojos 
Y sé que no escaparás
Miro tus ojos
Que empiezan a sonreír una vez más

Pretendo continuar con la misma perplejidad pendeja 
con la que empecé a tocar y seguir asombrándome.


Javier Malosetti

#bonus track
Miro tus ojos, solo los miro, me dicen todo, quieren andar, quieren brillar. Miro tus ojos y veo el sol en las noches tristes. La luna sale a cantar. Miro tus ojos que piden más. Miro tus ojos y veo tu voz  y entiendo todo y sé que no escaparás. 




La vida es una gran prueba y si te esforzás mucho, fracasás. 
Si no te esforzás demasiado y fracasás un poco, pero te lo pasás bien,
 tal vez entonces hayás triunfado.

Neil Young